La mermelada de frambuesas es un verdadero tesoro de la cocina chilena, con su característico sabor agridulce y un toque terroso, un complemento perfecto para muchas preparaciones.
Contenido
¿Cómo preparar dulce de frambuesa?
La frambuesa es un fruto delicado, por lo que se recomienda comprar frutos frescos entre noviembre y enero e idealmente prepararla el mismo día.
Receta de mermelada de frambuesas chilena
Preparación: 30 minutos
Cocción: 45 minutos
Calorías: 350 kcal
Raciones: 6 personas
Ingredientes
- 500 g de frambuesas
- 350 g de azúcar
- 1 limón
Instrucciones
- Selecciona las frambuesas y retira cualquier fruto dañado o rastros de tallos y hojas. Si están sucias, puedes lavarlas remojándolas en agua con unas gotitas de vinagre, sumergidas con un colador por 3 minutos, para luego enjuagarlas y estilarlas en papel absorbente.
- En una olla mediana, idealmente de cobre, añadir las frambuesas limpias, el azúcar y un chorrito de jugo de limón, calentar a fuego bajo por unos 10 minutos, revolviendo de vez en cuando.
- Si deseas, en este punto ya habrán liberado sus jugos y puedes moler los frutos a gusto con un tenedor; en cualquier caso, mantener por otros 30 a 40 minutos hasta que la mermelada adquiera la consistencia deseada. Reservar la mermelada de frambuesas aún caliente en frascos de vidrio esterilizados, tapar y luego enfriar boca abajo para sellarlos.
¿Cuánto dura la mermelada de frambuesas?
Si se almacena en frascos esterilizados y bien sellados, puede durar hasta 3 meses en un lugar fresco y oscuro; una vez abierta, debe conservarse refrigerada y consumirse en máximo 3 semanas.
¿Puedo hacer mermelada sin azúcar?
Sí, es posible hacer una versión sin azúcar usando edulcorantes naturales como stevia o eritritol, aunque se recomienda añadir pectina para ayudar a espesarla adecuadamente.
¿Se puede colar para quitar las semillas?
Sí, puedes pasarla por un colador fino o un pasapurés una vez cocida, aún caliente, para obtener una mermelada más suave y sin semillas.
¿Puedo usar frambuesas congeladas?
Sí, las frambuesas congeladas funcionan bien, pero deben descongelarse previamente y escurrirse un poco para evitar exceso de líquido.