
Deléitate con estas empanadas de manzana caseras, rápidas y fáciles de hacer, perfectas para disfrutar como aperitivo o postre, y especialmente ideales para la hora del té.
Contenido
¿Cómo preparar empanadas de manzana?
Estas empanadas son un bocado típico del sur de Chile, especialmente en Chiloé, donde se utilizan variedades de manzanas locales que, aunque pequeñas, están cargadas de sabor.
Receta de empanadas de manzana
Preparación: 20 minutos
Cocción: 40 minutos
Calorías: 300 kcal
Raciones: 6 personas
Ingredientes
- 1 kg de harina de trigo
- 10 manzanas grandes
- 500 g de mantequilla
- 200 g de azúcar blanca
- 200 g de azúcar morena
- 50 g de mantequilla
- 50 ml de agua
- 20 g de maicena
- 10 g de canela en polvo
Instrucciones
- Cierne la harina en un bol grande y mezcla con el azúcar y 500 g de mantequilla hasta obtener una masa homogénea. Deja reposar sin cubrir.
- Pela y corta las manzanas en cuadritos. Colócalas en una olla grande con el azúcar morena, canela y mantequilla sin sal. Cocina a fuego medio, tapado, hasta que las manzanas suelten su jugo y se tornen brillantes y cocidas.
- Disuelve la maicena en el agua y añádela a las manzanas. Revuelve suavemente hasta que la mezcla espese. Retira del fuego y deja enfriar a temperatura ambiente.
- Estira la masa sobre una superficie enharinada hasta que quede delgada. Usa un plato o molde para cortar círculos. Coloca una cucharada grande de relleno en cada círculo, dobla y sella los bordes con las yemas de tus dedos o con un tenedor.
- Coloca las empanadas en una bandeja de horno y pincha la superficie con un tenedor. Precalienta el horno a 200°C (392°F) y hornea las empanadas durante unos 20 minutos o hasta que estén doradas.
- Retira del horno y espolvorea con azúcar flor y/o canela si lo deseas. Sirve las empanadas de manzana frías o tibias.
Información nutricional
Las manzanas son una excelente fuente de fibra y vitamina C, ayudando a mejorar la digestión y fortaleciendo el sistema inmunológico.
¿Sabías qué?
El manzano, de donde provienen las manzanas, es nativo de Asia Central. Esta fruta ha sido cultivada durante miles de años y fue introducida en América del Norte por colonos europeos.