
Las manzanas confitadas son una entretenida y fácil alternativa para preparar esta golosina clásica de fruta, ideal para recordar los momentos escolares y los cumpleaños infantiles.
Contenido
¿Cómo preparar manzanas confitadas?
Las manzanas confitadas son muy versátiles a la hora de decorar y se pueden acompañar con mostacillas, chocolate, coco rallado o cualquier otro adorno que desees.
Información nutricional
Preparación: 30 minutos
Cocción: 10 minutos
Calorías: 350 kcal
Raciones: 6 personas
Receta de manzanas confitadas
Ingredientes
- 500 g de azúcar
- 200 ml de agua
- 6 manzanas grandes
- 2 cucharadas de limón
- ½ cucharada de colorante rojo
- Mostacillas
- Coco rallado
- Cobertura de chocolate
- Palitos de helado
Instrucciones
- En una olla mediana, añade el azúcar, el agua y el jugo de limón. Revuelve constantemente hasta que el azúcar se disuelva por completo. Calienta a fuego medio y cocina hasta que el azúcar se derrita y adquiera un color caramelo formando un almíbar a punto de pelo. Añade el colorante y revuelve hasta integrar en un rojo intenso.
- Lava y seca las manzanas. Inserta firmemente un palito de helado en la parte superior de cada una. Baña las manzanas en el caramelo rojo usando movimientos envolventes. Escurre el exceso y rebózalas con mostacillas de colores o coco rallado.
- Opcionalmente, derrite la cobertura de chocolate a baño María y sumerge las manzanas hasta cubrir al menos tres cuartas partes de la superficie, o decóralas libremente con chocolate en forma de hilo. Reposa en frío hasta el momento de consumo.
Historia y origen
Las manzanas confitadas o manzanas caramelizadas fueron elaboradas por primera vez en Estados Unidos en 1908, cuando William W. Kolb, un pastelero de Nueva Jersey, desarrolló un nuevo caramelo de canela roja y comenzó a venderlas en su tienda.
¿Sabías qué?
La palabra «confite» proviene del catalán «confit» (dulce de fruta) y este a su vez del latín «confectum» (confeccionado), compuesto del prefijo «con» y el verbo «facere» (hacer).