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La chocotorta es un postre tradicional argentino que se hizo sumamente popular en la década de los 80, especialmente en las regiones del sur del país.
Contenido
¿Cómo hacer chocotorta casera?
La chocotorta es una deliciosa preparación casera, inspirada en el tiramisú italiano, pero hecha con ingredientes listos para usar, lo que significa que no requiere cocción, solo un simple montaje.
Receta de chocotorta argentina
Preparación: 15 minutos
Reposo: 12 horas
Calorías: 350 kcal
Raciones: 6 personas
Ingredientes
- 400 g de galletas de chocolate
- 600 g de queso mascarpone
- 600 g de manjar
- 200 ml de agua caliente
- 100 g de chocolate
- 2 cucharadas de café
Instrucciones
- En un bol grande reunir el queso mascarpone y el dulce de leche y mezclar con una varilla de cocina hasta obtener una crema suave, lisa y homogénea.
- Diluir el café en el agua caliente en un tazón, remojar las galletas por 2 a 3 segundos, una cada vez, y disponer en un molde cuadrado hasta cubrir la base.
- Distribuir una capa de la mezcla de queso y manjar, repetir el proceso nuevamente hasta formar al menos 3 capas y finalizar con el resto de cobertura.
- Decorar con el chocolate rallado o en virutas, cubrir con papel film e idealmente reposar en el refrigerador por al menos 12 horas antes de servir.
Consejos adicionales
Si es posible, utiliza las galletas de chocolate llamadas «chocolinas», que suelen tener una mayor proporción de cacao y son menos dulces que otras galletas de chocolate. En lugar de Oporto (utilizado en la receta original), el café soluble es una excelente opción para remojar las galletas, especialmente si deseas que todos, incluyendo los más pequeños, puedan disfrutar de la chocotorta.
Información nutricional
La chocotorta aporta calcio, fósforo, magnesio y vitaminas A y B2 gracias al queso mascarpone y el chocolate. Su contenido en cacao ofrece antioxidantes, pero es alta en azúcares y calorías.
¿Sabías qué?
La receta actual de la chocotorta fue popularizada por la publicista y amante de la gastronomía, Marité Mabragaña, como una forma de promocionar las galletitas producidas por la entonces empresa argentina Bagley. Desde entonces, se ha convertido en un postre icónico de Argentina y se ha disfrutado en hogares de todo el país.
